COMO CAMBIAR PAÑALES

Para la mayoría de los padres, durante el período inicial siguiente al nacimiento, los pañales desechables son los más convenientes. Es más fácil que el cordón umbilical permanezca seco, manteniendo lo mojado alejado de la piel del bebé.

Doble el pañal hacia abajo para mantenerlo alejado del cordón umbilical.

Usted debe revisar el pañal justo antes de que su bebé se disponga a dormir, poco después de que despierte y antes y después de alimentarlo.

No tiene que despertarlo para revisar o cambiar sus pañales.
Cuando el bebé esté mojado o sucio, limpie el área cubierta por el pañal con un paño de lavado con jabón y agua tibia, enjuagando después el área con agua limpia, o utilice toallitas para el aseo infantil que no contengan alcohol.

Regularmente, las rozaduras causadas por los pañales pueden evitarse lavando cuidadosamente el área del pañal, no usando dos veces un mismo paño y lavando debidamente los paños y los pañales. En ocasiones, la orina de los bebés puede contener cristales de ácido úrico que dejan manchas de color anaranjado o enmohecido en el pañal. Esto se puede notar sólo una o dos veces durante los primeros dos días, y no es motivo de preocupación.
No se recomiendan los talcos y aceites para bebé. Si el trasero de su bebé enrojece o se irrita, séquelo al aire con mucha frecuencia. También puede aplicarle vaselina de petróleo.

El Cambio de Pañales de las Niñas

Las bebitas pueden tener inflamada su vulva (área genital exterior) y pueden presentar una secreción blanca y mucosa de la vagina durante varios días después del nacimiento. La secreción puede estar incluso teñida de sangre por los efectos de las hormonas maternas. Esto no debe causar preocupación. Un ligero lavado de la vulva, limpiando de adelante hacia atrás, es todo lo que se requiere.

El Cambio de Pañales de los Niños

Al lavar varoncitos, asegúrese de levantarles el escroto para limpiar todo resto de materia fecal. Hasta en minúsculas cantidades, los residuos de materia fecal pueden causar irritación.